Se encontraba confundido y triste, había urdido el mundo, el barro y la pena, dispuso las aguas, distribuyo la arena, diseño el tiempo y sus ciclos que ordenan, entrego el fuego que es calido y quema. Inspiro el giro, el papel y la letra, aconsejo el grupo y no previo la guerra.
Cabizbajo murmuro entre dientes: no podré evitar que ese hombre disponga de la orden final que la historia cercena.
Triste y abatido sentencio: del barro te hice y hacia el barro vas.
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